Piden ayuda para reconstruir la vivienda de B° El Cañito que se incendió tras la explosión de una garrafa
El pasado 19 de junio, el hecho conmocionó al barrio. Joan, un joven que estaba en la vivienda, sufrió importantes heridas y está internado en el Instituto del Quemado de la ciudad de Córdoba. Su mamá María, que también vive en el lugar, pide ayuda con materiales para volver a levantar la casa y ropa y otros elementos básicos para retomar sus vidas. Amigos habilitaron también una cuenta para donar dinero.
El pasado 19 de junio, el hecho conmocionó al barrio. Joan, un joven que estaba en la vivienda, sufrió importantes heridas y está internado en el Instituto del Quemado de la ciudad de Córdoba. Su mamá María, que también vive en el lugar, pide ayuda con materiales para volver a levantar la casa y ropa y otros elementos básicos para retomar sus vidas. Amigos habilitaron también una cuenta para donar dinero.
Consultada por la Radio Tortuga, María relató lo que pasó en el siniestro y cómo les afectó: «Lo perdimos todo. Todavía no me atrevo a entrar a lo que era mi casita. Me han pasado fotos y no ha quedado nada. Está todo destruido y quemado. Por ahora estoy preocupada y ocupada por mi hijo Joan, que si bien ha mejorado desde que ingresó, se complicó por un problema en las vías respiratorias. Tiene sus manos muy comprometidas de cuando ingresó a la casa a apagar el fuego. Necesito empezar de nuevo, porque me quedé sin nada. Me quedé sin mi ranchito, sin mi casita».
En ese sentido, explicó que paea reconstruir el hogar necesita todo tipo de materiales para la construcción: «Ladrillos, portland, chapa, una ventana vieja, una puerta vieja. Uno de mis hijos trabaja en la construcción y con otros muchachos me dijeron que si conseguimos materiales, ellos van a ver de hacer tiempo para darme una mano. Necesito volver a hacer mi casita, por lo menos una pieza y un baño para mudarme de vuelta, porque quedé con lo puesto».
Del día del incendio, recordó: «Me salvé ese día porque salí antes y no estaba en la casa. Mi hijo me dijo que ese día se levantó mareado, que sintió olor y prendió la luz y voló todo. Intentó apagarlo pero no pudo».
María es una trabajadora de cocina, que en estos momentos está desempleada. Un amigo le ha facilitado un lugar en su casa para quedarse, mientras se vuelve a levantar la suya; y con otras amigas armaron también una colecta para hacer frente a los gastos que se presentan.
«Mucha gente muy generosa me ha traído ropa. Me han traído zapatillas para mí, pero no consigo el número 42 para Joan. Yo sé que voy a salir, Alta Gracia está siendo solidaria», concluyó esperanzada.
Datos para colaborar:

Medio Cooperativo y Comunitario de Alta Gracia - Córdoba, Argentina
¿Te gustan las notas de Diario Tortuga?
Apoyá el periodismo idependiente.
Enviá tu comentario